Life Balance Instalaciones

MI HISTORIA


POR FRANCISCO EMMELHAINZ I FUNDADOR DE LIFE BALANCE

Hola, te contaré una historia con la cual probablemente te identifiques, espero que te inspire y te ayude a comprender que el éxito es posible siempre y cuando se siga una metodología lógica bajo una estructura de calidad.

Mi nombre es Francisco Emmelhainz, soy el fundador de Life Balance. Desde pequeño me entusiasmaba la idea de convertirme en un atleta profesional, pero muy pronto pude darme cuenta que debido a mi estatura y a mi falta de habilidades físicas, vendrían una serie de intentos, rechazos y fracasos en diferentes disciplinas deportivas.

Nunca dejé que las decepciones me desanimaran, de tal forma que seguí entrenando para ser cada vez mejor, y así después de mucho esfuerzo me gané mi lugar en el escenario deportivo profesional en el deporte Jai-alai. Este deporte se juega en un frontón, en el cual, una pelota (que es del tamaño de una bola de tenis y de la densidad de una bola de golf) es lanzada con una cesta, alcanzando velocidades de hasta 302 kilómetros por hora (188 millas por hora - Guiness Book of World Recods). Se requiere de gran capacidad atlética el jugar este deporte exitosamente a nivel profesional.

En el año 2004, firmé mi primer contrato en Estados Unidos como atleta profesional representando a la empresa de Orlando Jai-alai and Race Book. Sin embargo a raíz del pobre desempeño durante mi primera temporada, se me pidió la renuncia en varias ocasiones.

Como mi incipiente carrera profesional pendía de un hilo, me dediqué a buscar cómo mejorar mi desempeño atlético, evitar lesiones y principalmente, cómo mejorar la calidad de mi vida. Y de ésta manera comenzó mi preparación en RDV Sportsplex el principal centro de salud y bienestar de Florida, dedicado al desarrollo de atletas profesionales y dónde un equipo de entrenadores certificados de primer nivel, me mostraron el camino de la excelencia en el desarrollo físico, y la preparación para alcanzar el máximo de mis capacidades.

Uno de mis entrenadores (el ex preparador físico de la tenista Martina Hingis), me aconsejó elevar mi preparación (física y académica) en diferentes áreas de la ciencia del deporte. Ello me cambiaría la vida y me ayudaría a llegar a la cima. Así que durante los 7 años que siguieron, me entregué completamente a mi crecimiento profesional:





Emocionado pero sin saberlo enfrentaría un nuevo evento adverso. En una de las temporadas, mientras se desarrollaba unos de los juegos más intensos de mi carrera, sufrí un pelotazo en el rostro, el cual me hizo perder siete dientes y parte del hueso de mi mandíbula. Después de la reconstrucción maxilofacial regresé a las canchas. Mi preparación mental y mi incansable entusiasmo me hicieron más fuerte, me hicieron superar mis miedos.

Aplicar todo lo que estudié durante mis años previos finalmente comenzó a dar resultados. En el año 2010 fui ascendido en mi ranking deportivo logrando con ello mi pase a uno de los torneos más importantes del circuito mundial profesional de Jai-alai, en el cual, solo se escogen a los mejores jugadores del circuito (lo equivalente a un Masters en el tenis y golf).

En contra de todas las predicciones y a pesar de enfrentar a jugadores más experimentados... gané ese torneo.

Toda ésta felicidad de haber alcanzado mis metas me hizo darme cuenta que la integración de todas las áreas de estudio de mi preparación previa, mi experiencia, mi desarrollo profesional y la tecnología correcta le pueden cambiar la vida a cualquier persona, elevando considerablemente su calidad de vida, logrando mejores capacidades de movilidad y estabilidad, una gran potencia fuerza y energía, un gran desempeño en actividades cotidianas y atléticas, una reducción en molestias y lesiones, un sistema inmunológico reforzado, elevados niveles de concentración y agilidad mental, una gran apariencia simétrica y saludable, alegría, relajación y gozo de vida, etc. En pocas palabras, “un sentido de bienestar total”.

Yo soy Francisco Emmelhainz, ésta es mi historia, si yo logré llegar a la cima, “tú también lo puedes lograr”.